Ecologistas en Acción de Granada, la Asociación Somos Vega. Somos Tierra y a la Agrupación de Voluntariado Ambiental de Santa Fe, AUCA, han presentador alegaciones a la megaplanta fotovoltaica que la empresa madrileña Ence Energía S.L. proyecta en los términos municipales de Las Gabias, Vegas del Genil y Santa Fe, en concreto, entre el Parque Periurbano de la Dehesa de Santa Fe, espacio protegido perteneciente a la RENPA, y la Zona Especial de Conservación de La Malahá, espacio protegido perteneciente a la Red Natura 2000, cuyo eje en este sector es el arroyo Salado.
Este proyecto, supondría la instalación de un total de 201.632 módulos o paneles fotovoltaicos ocupando una superficie de 155 hectáreas, más las afecciones provocadas por la línea de evacuación eléctrica que atravesaría toda la Vega de Granada hacia el norte, pasando por Santa Fe, Pinos Puente, Albolote y Atarfe.
Entre las alegaciones presentadas las organizaciones ambientales citan las siguientes:
Por todo lo anterior, Ecologistas en Acción, Somos Vega-Somos Tierra y AUCA, han solicitado a la Junta de Andalucía que no se autoricen dichos proyectos fotovoltaicos. En este sentido, tanto estas entidades como otras que están mostrando interés por este caso "van a llevar a cabo todas las gestiones que correspondan para procurar que esa megaplanta fotovoltaica no llegue a materializarse".
Este es el slogan, "solares sí, pero no así", o "renovables sí, pero no así", con el que multitud de colectivos en toda España están reclamando un modelo de transición energética "justo", poniendo la defensa del territorio y su biodiversidad en el centro.
Según explican las tres asociaciones ambientales, en los últimos tiempos se está constatando la proliferación, por doquier, de proyectos para la producción de energías renovables, sobre todo campos de aerogeneradores y plantas fotovoltaicas. Esto, que parece loable y deseable en un contexto de cambio climático y crisis energética globales, sin embargo, se está encontrando con la oposición de multitud de colectivos, tales como asociaciones ecologistas, naturalistas, plataformas ciudadanas, agricultores/as, habitantes de los territorios afectados, etc.
¿Cuál es la causa de este enfrentamiento? Para acercarse con detalle a la respuesta se pueden consultar diversos documentos, escritos o las webs de muchos de esos colectivos como, por ejemplo, la de la Alianza Energía y Territorio, Aliente, alianza a nivel nacional que aglutina a más de 200 entidades y colectivos diversos, que en líneas generales se han unido "para proponer una transición energética justa, basada en la generación renovable distribuida, el ahorro energético y el autoconsumo, una transición que ponga la defensa del territorio y su biodiversidad en el centro".
El rechazo frontal a estos proyectos se sustenta, principalmente, en tres aspectos:
Estas afecciones se evitarían con una práctica basada en la distribución del recurso entre la ciudadanía, fomentando el autoconsumo, así como el uso de todas las superficies disponibles con capacidad para albergar placas solares, tales como tejados de viviendas y naves industriales, equipamientos o infraestructuras de distinta naturaleza pertenecientes a las distintas administraciones, etc., estiman las asociaciones.