• ¿Qué pasaría si los resultados electorales del pasado domingo se replicaran en unas elecciones municipales?
• Vox podría obtener dos concejales
Los comicios para elegir a nuestros representantes locales están a la vuelta de la esquina. Este mes de mayo seremos llamados de nuevo a las urnas y no es de extrañar que los partidos políticos se hagan sus propios cálculos e interpreten los resultados del pasado domingo en clave municipal.
Es evidente que los ciudadanos solemos comportarnos de forma distinta dependiendo del carácter local, regional o nacional de las elecciones. Pero también es cierto que por su cercanía temporal el veredicto emitido por las urnas en estos comicios autonómicos puede otorgar una idea bastante aproximada sobre qué va a ocurrir en las próximas locales.
Tabla con los resultados electorales en Santa Fe.
Fuente: Junta de Andalucía
Simulación para las elecciones municipales en Santa Fe.
Fuente: Elaboración propia
Aplicando el sistema de restos, la conocida como Ley D’Hondt, que se usa para calcular de forma proporcional la distribución de representantes conforme a los votos obtenidos por cada partido, el Pleno del Ayuntamiento de Santa Fe quedaría configurado tal y como se puede apreciar en la tabla.
De acuerdo con esta simulación el Psoe mantendría los seis ediles actuales. Mientras el Partido Popular perdería un asiento en el Consistorio, quedándose con cuatro representantes. Ciudadanos mantendría sus tres concejales a la vez que una hipotética coalición de Podemos con IU estaría representada con dos concejales . En cuanto a la gran revelación de estas elecciones, si se presentara a las municipales y en el caso de repetir resultados, Vox obtendría dos ediles .
Así pues, con esta composición del Pleno la suma de PP, Ciudadanos y Vox compondría una amplia mayoría de nueve concejales . Un número más que holgado para gobernar el Ayuntamiento santafesino. De darse esta posibilidad sería la primera vez que el Partido Socialista no gobernara Santa Fe. No obstante, esto es sólo una conjetura que salvando la inexactitud de la traslación de los resultados, exigiría también de los hipotéticos pactos poselectorales, que requiere de una análisis no sólo aritmético, o incluso político o sociológico, sino también psicológico.