La portavoz de VOX en el Ayuntamiento, Silvia Enríquez, propone la creación de un Consejo Municipal del Comercio.
Desde VOX reclaman al equipo de gobierno socialista ayudas a comerciantes y autónomos.
VOX observa con preocupación los cada vez más frecuentes locales cerrado en las zonas comerciales de Santa Fe y demanda al equipo de gobierno municipal un plan de acción efectivo que revitalice la vida comercial de Santa Fe.
“El centro de Santa Fe ha sido tradicionalmente un punto comercial muy activo y con una oferta muy completa al que acudían vecinos y visitantes”, reflexiona la concejal de VOX, Silvia Enríquez. Sin embargo: “la inacción de los sucesivos gobiernos socialistas ha puesto en grave riesgo este importante activo del municipio”.
Enríquez no duda en calificar la situación como de “depresión económica” y afea al PSOE su falta de compromiso. En este sentido, señala al “mal llamado Plan de Reconstrucción, que solo se ha traducido en una subida de impuestos, sin albergar ninguna medida para nuestras empresas”.
Así mismo, reclama las subvenciones a comerciantes y autónomos a las que se comprometió el concejal delegado de Comercio, Carlos Marcos, en diciembre de 2020 para impulsar a los negocios que habían sufrido los cierres por la pandemia. “De estas ayudas nada sabemos. Solo conocemos el sablazo que el PSOE y sus socios han dado a los empresarios de este municipio, subiendo el IBI a comercios, locales y almacenes un 51,73% y a la hostelería un 27,03%”, afirma Silvia Enríquez.
Ante esta situación, VOX propondrá en el próximo Pleno la creación un Consejo Municipal del Comercio “para impulsar el sector y favorecer el diálogo con nuestros empresarios, para así implementar medidas efectivas para desarrollar la economía de nuestra localidad”.
“El PSOE ha abandonado a los comerciantes”, denuncia la edil de VOX. “Lo comprobamos cuando se opusieron a destinar los 26.000 euros asignados a grupos políticos para ayudar a los comercios”. Ahora esperan que el gobierno liderado por el socialista Manuel Gil reaccione para salvar a los cada vez más escasos comercios que resisten en la histórica ciudad de la Vega